La mejor medicina para el resfriado

La mejor medicina para el resfriado

La mejor medicina para el resfriado
¿Cuál es la mejor medicina para el resfriado?


Intentemos descubrirlo juntos, empezando por cuál es la patología. El resfriado es un trastorno que afecta las vías respiratorias superiores, especialmente la mucosa nasal, y se caracteriza por múltiples síntomas. Las principales causas son de origen infeccioso, en particular viral y en menor medida bacteriano; Otra causa que puede determinar los síntomas de un resfriado es la alergia. Es precisamente a partir de los síntomas que debemos empezar a introducir los fármacos que se pueden utilizar para los resfriados. En realidad, no existe un mejor fármaco para los resfriados, pero existen múltiples fármacos que actúan, con diferentes mecanismos, sobre la cohorte de síntomas del resfriado. Por lo tanto, el tratamiento no es más que un apoyo para la reducción de los síntomas que incluyen:

     Congestión nasal
     rinorrea
     Boca seca
     Dolor y/o ardor en la garganta.
     Picazón en el paladar y la garganta.
     Estornudos frecuentes
     Tos
     Dolor de oidos
     Ojos que pican

Estos síntomas pueden durar hasta 10 días, variando la intensidad y apariencia dependiendo de la predisposición del sujeto así como de la presencia de otras patologías como rinitis, asma, bronquitis y alergias.

A continuación enumeraremos los principales medicamentos para tratar los síntomas del resfriado:


Los antipiréticos y analgésicos como el paracetamol reducen la fiebre, los dolores articulares, el dolor de garganta y el dolor de cabeza. Pueden tomarlos tanto niños como adultos. Existen diferentes formas farmacéuticas a base de paracetamol, como comprimidos, sobres, supositorios y jarabes. Además, existen en el mercado muchas formulaciones farmacéuticas que se combinan con descongestionantes, antihistamínicos y antioxidantes. Es importante subrayar algunos puntos fundamentales respecto de este principio ampliamente utilizado. El paracetamol tiene una acción antiinflamatoria leve y en consecuencia no contribuye a la reducción del edema que afecta a la mucosa nasal, es decir, no reduce la congestión nasal y tampoco es muy eficaz en casos de garganta inflamada e hinchada pero tiene una importante acción analgésica. . El paracetamol está presente en varios medicamentos de venta libre que tienen diferentes nombres comerciales por lo que siempre debes leer atentamente el principio activo del medicamento que tomas para evitar sobredosis. Por último, la dosis máxima de paracetamol para un sujeto adulto es de 3 gramos al día, considerando la administración por vía oral. Para tratar la fiebre en adultos, es suficiente utilizar comprimidos de 500 mg, uno cada 6 horas, posiblemente aumentando la frecuencia de toma a 1 comprimido cada 4 horas en caso de fiebre muy alta o en el caso de un sujeto con un peso corporal elevado. .a la norma. La última aclaración respecto al paracetamol es que tiene una farmacocinética variable cuando se administra por vía rectal, de hecho parece tener una absorción aproximadamente un 50% menor respecto a la misma dosis por vía oral. Es por eso que tanto la formulación oral de 500 mg como la formulación de supositorio de 1000 mg son medicamentos de automedicación y las dos formulaciones en términos de absorción del ingrediente activo son casi iguales.

Los antiinflamatorios como el ibuprofeno, el naproxeno y el ácido acetilsalicílico reducen la fiebre, el dolor articular, la congestión nasal, el dolor de cabeza y la faringitis. El ibuprofeno también puede utilizarse en población pediátrica, generalmente en forma de jarabes o supositorios. Representa la primera opción en el tratamiento de la fiebre, después del paracetamol y es eficaz en la mayoría de los síntomas del resfriado a partir de 200 mg para adultos. Está presente en varias combinaciones con descongestionantes y antihistamínicos. El naproxeno está indicado a partir de los 5 años y no es la primera opción de tratamiento para los síntomas del resfriado tanto en adultos como en niños, ya que está indicado principalmente para la artritis reumatoide, la gota, la neuralgia, los dolores articulares, los dolores de cabeza y los dolores de dientes. El ácido acetilsalicílico tiene propiedades antiinflamatorias únicas, reduce el dolor de garganta, la fiebre y la congestión nasal. No está indicado en niños menores de 12 años. Generalmente se asocia con Vitamina C, para favorecer las defensas inmunitarias. Es más perjudicial gastronómicamente que otros antiinflamatorios por lo que se recomienda tomarlo con el estómago lleno, tiene algunas interacciones con otros fármacos pero sigue siendo muy eficaz para reducir la inflamación caracterizada por edema, hinchazón y enrojecimiento. La mayoría de los antiinflamatorios y sus fichas técnicas asociadas se pueden consultar en este enlace de nuestra tienda online.

Mucolíticos y expectorantes, como ambroxol, sobrerol, acetilcisteína, carbocisteína y guaifenesina. Estos fármacos, si bien por un lado pueden favorecer la eliminación del exceso de moco rompiendo determinados enlaces químicos presentes en el moco, haciéndolo menos viscoso y más fácil de eliminar, por otro lado tienen características importantes que no deben subestimarse. De hecho, en primer lugar debemos subrayar cómo la mucosidad y la tos resultante representan importantes formas de defensa que nuestro organismo implementa para eliminar los distintos organismos patógenos responsables de las infecciones y la consiguiente inflamación. En particular, se debe prestar atención a la población pediátrica, para quienes la eficacia de los mucolíticos aún no ha sido estudiada en profundidad y además pueden representar un riesgo de asfixia. La mayoría de mucolíticos están contraindicados en niños menores de 2 años y para algunas moléculas la indicación terapéutica es a partir de los 6 o 12 años. Los otros sujetos más vulnerables son los ancianos, los bronquitis crónicos, los asmáticos y los encamados. Para todos estos, los mucolíticos deben usarse con especial precaución, ya que pueden exacerbar algunos síntomas que provocan broncoespasmo y obstrucción de las vías respiratorias. Por tanto, es aconsejable seguir las indicaciones del médico y vigilar a estos sujetos en caso de tratamiento con fármacos de acción mucolítica. Para más información sobre los principales fármacos mucolíticos y expectorantes puedes seguir el siguiente enlace.

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